martes, 21 de abril de 2020

Jai Alai Blues, cuando la cesta punta conquistó el mundo


Reseña del documental Jai Alai Blues, Gorka Bilbao y Zigor Etxeberria, 2015. 

https://www.filmin.es/director/gorka-bilbao

Cientos de pelotaris profesionales, decenas de frontones por todo el mundo, miles de seguidores, millones de dólares de negocio… Para los amantes de la pelota vasca, Jai Alai Blues no es un documental más, sino una referencia: es un compendio perfecto del boom de este deporte y su declive, con moraleja incluida. Un canto melancólico, realista o esperanzador, según se mire, hacia este deporte.



Jai Alai Blues, ETB, documental completo

El documental nos recuerda la no tan lejana época dorada de la cesta punta, en cuanto a su popularidad y expansión; y su evolución hasta nuestros días, lejos ya de ese esplendor, pero con otras cosas, otras posibilidades. Tras alcanzar cotas de popularidad mundial, en varias décadas en las que se llevó este deporte a sitios tan lejanos como China, Egipto, Filipinas, Cuba, México o EE UU, fue protagonizando un declive constante hasta hoy. El documental recopila en 100 minutos varias claves para entender la evolución de este deporte, con nombres propios y varias cuestiones claves que nos ayudan a entender una situación actual de crisis, y por tanto de oportunidad de cambio.  

Resulta fascinante descubrir que, entre el siglo XIX y XX, se jugaba a pelota vasca profesional en lugares tan remotos como Shanghai, Manila, Sao Paulo, El Cairo, Ciudad de México o La Habana. Uno echa a volar la imaginación y vislumbra a aquellos vascos emprendedores que acudían con la cesta debajo del brazo convencidos de su éxito como negocio, siempre unido a un rendimiento económico, la apuesta, en sitios bulliciosos y con masivos y continuos movimientos de dinero. En un mundo sin televisión, sin internet y sin deportes de masas, el denominador común de aquellos lugares exóticos era la presencia de migrantes españoles y franceses en torno a mercados con mucho dinero en torno a la industria y el comercio; y la extraordinaria y entusiasta aceptación de los lugareños a ese modelo rápido, incierto y espectacular de engrosas o perder sus ganancias mediante apuestas. 
  
Uno imagina un El Cairo colonial, con tipos adinerados alrededor del Canal de Suez y el mercadeo entre el trajinar de los barcos; el mercado asiático en Shanghai y Manila de principios del siglo XX, con un trasiego ilimitado de exportaciones e importaciones de todo tipo de productos; una Habana recién independizada de España (en 1898), con lazos estrechos con su tierra madre y con una oleada de proyectos y negocios en América, y dinero a manos llenas en el célebre “Palacio de los gritos”; o un frontón que era una hervidero en la Ciudad de México esfervescente de los años 50 y 60, cada vez más poblada y en expansión. 

El actor John Travolta, en los años 70. 
La parte estadounidense del Jai Alai es su canto del cisne previo al colapso. De contar con 700 puntistas profesionales, en Miami, Orlando, Conneticut, Rhode Island, Las Vegas, Reno, a finales de los 70 y principios de los 80… a la nada.

Durante los 70, el negocio del Jai Alai despega desde Florida de la mano de la apuesta, se liga a clanes familiares de inmensas fortunas y se esparce por ese inmenso país. El Jai Alai es ruido, fiesta, gritos, dinero a espuertas, miles de aficionados en directo, y entre ellos, palcos vip, famoseo… Una foto del John Travolta joven y pletórico, con una cesta en pleno ambiente resume la época… El dinero de la apuesta, salpicado por capítulos turbios relacionados con mafias, tiene también en EE UU episodios dignos de película, con el asesinato de dos dirigentes del jai alai sin esclarecer incluidos.

Cheerleaders en los años del esplendor del jai alai. 
En el Jai Alai estadounidense hay una familia clave en su expansión desde Miami, los Berenson (tres generaciones). Introducen las quinielas, el sistema rápido de apuestas por excelencia. Los Berenson crean el World Jai Alai, llegan a operar 16 frontones con unos 700 pelotaris hacia 1978. Todos los años viajan a Gernika para captar nuevos talentos. El Miami Jai Alai llega a congregar a 15.000 espectadores. Realizaban temporadas de 5 meses. El frontón de Hartford llega a conseguir 92 millones de dólares en ganancias en un solo año, y deciden pasar a jugar todo el año. 

La película fluye de la mano de auténticos mitos de la cesta punta.

Teodoro Jáuregui llegó a Egipto en 1915, donde ya existía el Jai Alai… e inaugura en la delegación francesa de Shanghai en 1920 el Frontón Auditorium. Las apuestas estaban prohibidas en China, pero no en las concesiones europeas. Y en 1941, abre un frontón en Manila.

Guillermo Amutxastegui, zaguero revolucionario, de juego ofensivo y vida de Hollywood. Nace en Ondarroa pero con solo 14 años viaja Florida, y con 16 acude de Miami a Nueva York, donde alterna con el gángster Jack Smith; regresa a Cuba, donde se convierte ídolo absoluto, y se mezcla con la auténtica jet set de aquella sociedad (Hemingway, John Wayne, Esther Williams y Guillermo eran conocidos como D`Artagnan y los tres mosqueteros). 


Juan Ramón Rementeria, Remen. Con 17 años acude a EE UU y se convierte en su primera temporada en el primer pelotari en lograr un Home Rond en el Miami Jai Alai: pegar un rebote directo, botar y volver a golpear el frontis. Fue un delantero de apariencia liviana, pero excepcional pegada. Toda su vida irá ligada a la cesta punta, hasta protagonizar junto a otros compañeros una huelga en 1988, en contra de varias medidas impuestas por su empresa, que se prolongó dos años y medio. Fue un error, al reabrir, nada volvió a ser igual.



El Palacio de los gritos, el frontón más mítico de Cuba, en la calle Concordia. Con la revolución cubana (1953-59), acaban las apuestas y muere el Jai Alai profesional en Cuba. El Palacio de los Gritos cierra en 1962.



La caída... ¿cambio de modelo?
La saturación que produjo alargar la actividad a todo el año, el surgimiento de competencia en las apuestas, el abuso de la patronal y la huelga excesiva... son varios los factores que se apuntan al declive del Jai Alai, que cayó cuesta abajo y sin frenos. Lo cierto es que en la actualidad, en Miami hay cesta punta solo por una ley que exige que se juegue Jai Alai en los frontones; pero simplemente se juega para poder abrir las instalaciones y explotar el negocio que les rinde, que son las máquinas tragaperras contiguas. Un triste epílogo. 

La esperanza se cierne ahora en un nuevo modelo, el de la pelota por la pelota, el juego por el espectáculo en sí mismo, y no por la apuesta. Una nueva apuesta que parece que no tiene cabida en el gran sueño americano. 

En un ámbito mucho más local, el remonte ha protagonizado una trayectoria similar al de la cesta punta. Los frontones industriales ya no funcionan como antaño con la apuesta, y la asistencia del público ha caído en picado: el Euskal Jai Berri lleva años cerrado; mientras que el frontón Galarreta resiste a duras penas.

La pelota mano, último reducto de la pelota vasca profesional, ha experimentado un bajón sustancia también en las apuestas.

Estamos definitivamente ante un cambio de modelo en la pelota, en el que dejamos de un lado el juego de la apuesta y nos centramos en el espectáculo del deporte. ¿Podrá sobrevivir en esta nueva era?




lunes, 20 de abril de 2020

Suspensión definitiva del Memorial Graciano Iriarte 2020

Se veía venir..

Nota del Club Frontón López: 

Estimados pelotaris y amigos del Club Frontón López,

 Debido a la situación de Estado de alarma y confinamiento derivados de la crisis sanitaria del Covid-19, lamentamos comunicar que hemos decidido suspender de forma definitiva la celebración del Memorial Graciano Iriarte 2020. La incertidumbre inicial que reinaba cuando se decretó el Estado de alarma provocó que, por esas fechas, os comunicáramos la decisión de retrasar el inicio del campeonato hasta al menos después de Semana Santa. Pero con el paso de los días, vemos del todo imposible la celebración del Memorial Graciano Iriarte en condiciones, dado que no entenderíamos su celebración a puerta cerrada o con restricciones respecto a la participación.

Tomamos esta decisión con mucha pena, pero de forma responsable, ya que creemos que este año es lo mejor para todos. Respecto a las cuotas ya abonadas: el dinero de la inscripción se devolverá a todos los participantes que lo soliciten (por favor, los interesados pueden comunicarse con el club a través del e-mail clubfrontonlopez@gmail.com). Otra opción, que nos facilitaría las cosas, es que los pelotaris que quieran disputar campeonatos en la campaña 2020-2021, dejen ese dinero en depósito, de manera que será descontado de alguna de las actividades de la próxima temporada. Nuestro tesorero llevará un riguroso control al respecto.

 Solo en el remoto supuesto de que la evolución de la crisis sanitaria fuera muy positiva, es decir, de que se levantara el confinamiento general y de que las autoridades sanitarias mandaran mensajes muy positivos y avalaran la celebración de deportes como el nuestro, podríamos valorar la organización de un campeonato relámpago antes de terminar la temporada. Pero siendo sinceros, esta posibilidad nos parece muy lejana a día de hoy. Muchas gracias a todos por vuestra comprensión.

Nos veremos pronto por los frontones!! Un saludo